Friday, September 14, 2012

Otra persona a quien querer


Mi experiencia como recién estrenada abuela -que ya tiene 8 meses y todavía me sorprende- es que de pronto tenemos otra persona a quien querer. 

Y no es que el amor se divida en pedacitos, uno aquí y otro allá, sino que esa nueva persona es parte integral de un gran ´todo'.  De un apasionante 'chorro' de amor que es la razón de nuestra existencia. Y ese amor que siento por los que quiero, es como una avalancha que comprende también esa nueva bebita llamada Miren Antonia Coffey, que es mi nieta.  La hija de Steve Coffey y de mi adorada hija Mari-Claudia Jiménez -y lo que se dice ´sangre de mi sangre´. ¡Nunca mejor usada esa frase!

Una personita que me fascina tan solo mirar y observar. Y ver como cambia, notar su curiosidad y casi como una ´voyeuse´  seguirle la vista y ver cómo mueve las manitos, y como observa lo que se le habla, casi tratando de leer mis labios e imitar mis sonidos. Es un amor total, que me fascina sentir porque me hace mejor persona y compruebo una y otra vez lo maravilloso que es querer a la familia,

Por supuesto, querer a esta nueva persona implica comenzar a preocuparme por alguien más. Que no se caiga, que no se haga daño, que nada le pase...Porque amor tiene para regalar. Su mamá y su papá la adoran. Sus tíos y tíos abuelos, sus primos, su otra abuela Maggy, su nanny Yazmin que la adora, sus parientes ¡una catarata de cariño la rodea! Pero la vida está llena de incógnitas y solo podemos encargársela a Dios, al recuerdo de mi madre y mi padre que la hubieran querido con el alma y ahora estoy segura 'velan' por ella.

Y -como me dijo ayer mi prima Purita- al poder de rezar -y pedirle ayuda y confiar en el misterioso y extraordinario poder de Dios-  lo que he hecho toda mi vida.  Y que en los momentos más terribles y duros que he pasado -y  a pesar de todas de mis diferencias de ´forma' con la religión organizada- nunca me ha fallado. 

¡Bravo dulce y bella Miren por haber llegado a mi vida!