Monday, January 18, 2016

La moda y sus emociones


¿Zapatos? ¿U obras de arte?

Los zapatos -de los que siempre he vivido enamorada- cada dia me sorprenden más, porque la última tendencia son los diseños complicados, con enorme originalidad --y algunos como si fueran esculturas -- ¡puras obras de arte y también verdaderos 'ejercicios' de valentía y voluntad para poder caminar con ellos con equilibrio!

Y algunos de última moda me tienen un poco preocupada, porque no estoy segura si me gusta tan solo miralos -o ponérmelos. ¡Los veo tan incómodos y raros! Y otros -como los 'sneakers´ (aunque sean de diseño) los detesto.


Por eso es que la ropa que llevamos debe ser más sencilla, menos complicada, pues los zapatos muchas veces son la 'estrella' del conjunto que llevamos.  Y lo más divertido es que desde las marcas más caras como Christian Louboutin, con sus suelas rojas, y los propios "manolos" de Manolo Blahnik --¡hasta los más económicos! -- son definitivamente muy artísticos. ¿Y los tacones? Como dicen en España ¡de vértigo!

Y esto ocurre en todas las facetas de la Moda...La ropa, los bolsos, los diseños de muebles, de objetos para la cocina, para la casa, ...¡y hasta las cosas más tontas!...todas tienen un giro original, un toque de 'arte' popular, de belleza, de impacto y hasta de surrealismo. 

Y eso me encanta porque es emocionante que en el siglo XXI haya un mayor respeto al diseño --y este pueda ser llevado a lo cotidiano con naturalidad y que nadie se sorprenda, ni haya un 'salon des refusés'.


¿Lo peor de todo? Que muchos de estos zapatos son tan espantosamente incómodos que voy a tener que hacer como hacía la millonaria árabe Mouna Al-Ayoub, quien tenía sus trajes de Chanel colocados en maniquíes y los colocaba como adornos en los salones de su mansión parisina. 

Y yo quizás pueda colocar esos zapatos 'de vértigo' junto a mis libros y mi colección de botellas de perfumes antiguas, en una esquinita del mínimo librero de mi minúsculo apartamento neoyorquino, donde compartián 'atagère' con muchas otras partes y seres de mi vida. 

Corin Tellado y yo


Una larga reflexion: ¿Corin Tellado y yo?

Lo tengo que confesar: las mujeres y los hombres de Corín Tellado moldearon profundamente mi adolescencia --y la visión de lo que era -¡o debía ser!- el amor.
Y aunque muchas personas adoran burlarse de aquellas novelitas románticas tan típicas de los años 50 y 60, en que las historias siempre terminan bien y el amor triunfa a toda costa --¡pienso que muchos de los que se burlan NUNCA leyeron a Corín Tellado!
Porque ella escribía de mujeres modernas, que no se dejaban dominar por los hombres, que tenían gran personalidad y que a la vez sentían una gran atracción por hombres que aunque fueran feos, siempre tenían ingenio, una irreverencia muy sexy -- y eran atractivos y sensuales con apenas un gesto o una mirada de sus "ojos acerados".
Corín Tellado nos familiarizó con las 'salas de fiestas', los 'descapotables', el cigarrillo 'colgando de la comisura de los labios', la americana abierta, el pelo todavía mojado por el agua del mar, los dedos 'cuadrados' y las manos bronceadas que encendían cigarrillos siempre a tiempo --y cierta truculencia que no llegaba más allá de unos besos de infarto y de un bailar con los cuerpos muy pegados, y de una mano fuerte y muy viril que nos agarraba del talle 'posesivamente'.
En aquellas relaciones 'inocentes' (mientras yo las leía, las parejas nunca llegaban a hacer el amor, lo que quizá ocurrió más tarde, cuando ya yo no leía las novelas)--había más voluptuosidad y más sensualidad que en mil novelas más 'fuertes' y atrevidas juntas. Las novelitas eran de una sensualidad-romántica increíble -y los hombres arquetipos de la virilidad más absoluta, los que -aunque a veces se portaban un poco mal- siempre caían rendidos ante el amor y ‘entraban todos por el aro’. ¿Y por qué la vida no siempre resulta así? Ah, porque el amor es cuestión de suerte y nada más. Pura suerte y a veces hasta esos hombres divinos todavía se encuentran por ahí.
¿Y por qué dejé de leer a Corín Tellado la que esperaba ansiosamente cada dos semanas cuando siendo una niña atrevida corría en La Habana a comprar la nueva Vanidades, donde aparecia su novela, al quiosco de la esquina?
Porque la llegada de Francoise Sagan -más cínica y modernísima- y de las divertidas películas de Brigitte Bardot (a quien yo imitaba en peinado y en todo lo que podía) me hizo dejar atrás las novelas y serle infiel a Corín Tellado. También porque comenzó la Revolución Cubana y mi adolescencia sufrió un terremoto de raíz. Y un buen dia no había nuevas novelitas que leer --y nos conformábamos con releer las viejas una y otra vez, lo que en medio de las carencias y las injusticias que nos rodeaban eran un gran escape y un gran consuelo.
Me gusta recordar todo esto --- y comprendo que los cientos de novelas que leí de ella --y el mundo tan maravilloso al que me llevaban- dejaron una fuerte marca en el idealismo que le puse toda mi vida al amor. Y recuerdo novelas que reflejaban gente interesante, lugares que me daban ganas de viajar y conocerlos todos, hombres 'como deben ser' -- y dejarme tantos, tantísimos, buenos recuerdos.

Mari Rodriguez Ichaso  - Nueva York - Enero 2016

Tuesday, January 12, 2016

¡Una leyenda parisina reabre sus puertas!



 
Por Mari Rodríguez Ichaso

¡El mundo de los viajes está de fiesta porque el hotel Ritz de Paris, toda una leyenda extraordinaria, reabre sus puertas! Una leyenda donde se practica el muy francés ‘art de vivre’ – y un histórico hotel palacio, donde los personajes más famosos del mundo han vivido y se han hospedado desde el siglo 19. Y por eso su reapertura es un verdadero ‘happening’  del que todos hablan, y después de 2 años cerrado, abre más bello y elegante que nunca, después de una restauración de 200 millones de dólares.

Cocó Chanel estaría celebrando la ocasión, porque allí vivió allí 34 años, igual que lo hicieran Ernest Hemingway, los duques de Windsor, el rey Eduardo VII,  la reina María de Rumania, y muchos más reyes y reinas del mundo entero, además de Salvador Dali, Maria Callas, Oscar de la Renta, Elizabeth Taylor, Michael Jackson y hasta Madonna. El Ritz ha sido el hotel donde todos deseaban quedarse en Paris –y aunque fuera tan solo para visitarlo, pocos son los viajeros que no conocen sus salones, restaurantes, bares y su Escuela de Cocina Escoffier. 

¡Y es el hotel que más ha aparecido en el mundo de la literatura y el  cine, en libros como Tender Is The Night de Scott Fitzgerald, The Sun Also Rises de Hemingway, el play Semi Monde de Noël Coward y películas como Amor en la Tarde con Audrey Hepburn, Funny Face y How to Steal a Million!  Una anécdota cuenta que cuando la esposa de Hemingway le pidió el divorcio el enfurecido escritor tiró al toilette de su habitación su foto ¡y le entró a tiros a la foto y a medio baño! Otra cuenta que en una ocasión el alto y grueso rey Eduardo VII se quedó trabado en la bañera del hotel con una amante -y 4 empleados del hotel tuvieron que rescatarlo- y de ese momento en adelante se instalaron bañeras mucho más grandes en el Ritz!

Comenzado en 1705 -y terminado en 1898- con diseño del arquitecto de Mansart, el arquitecto de los ‘royals’ franceses, fue fundado por el famoso ‘hotelier’ César Ritz -en colaboración con el chef Auguste Escoffier, padre de la alta gastronomía -fue el primer hotel europeo en ofrecer habitaciones con electricidad, baños privados, y teléfono. ¡Y pronto se llenaba de huéspedes famosos, royals, políticos, escritores, cantantes y estrellas de teatro y cine! Durante la Segunda Guerra Mundial fue ocupado por los nazis, que lo hicieron centro de operaciones de su fuerza aérea Luftwaffe. Y en 1976 al morir el ultimo heredero Ritz lo compró Mohamed Al-Fayed –padre de Dodi, quien como recordamos cenó allí en el Imperial Suite con la princesa Diana el 31 de Agosto de 1997, poco antes de partir del hotel (por la puerta de servicio de la rue Cambon, en el fondo del hotel)  en el auto que les causó la muerte a ambos.

El ‘nuevo’ Ritz (¡por suerte!) no ha cambiado en su estilo, sino en la modernización de sus servicios.   Su famoso diseñador Thierry W Despont no ha permitido que el hotel cambie, sino que reabra más elegante que nunca. Con 71 habitaciones y 71 suites, sigue ofreciendo sus famosas suites de prestigio –como las que honran a Marcel Proust, F. Scott Fitzgerald y al Duque of Windsor (decorada en un gris-azul llamado "Wallis blue", favorito de Wallis Simpson, duquesa de Windsor) - además de la legendaria Suite Imperial (Patrimonio Nacional de Francia) ---y la Suite Coco Chanel-que permanece con su vista única a la columna de la Place Vendôme --igual que sigue el divino restaurante L’Espadon (además de otros 2), a cargo del chef Nicolas Sale (4 estrellas Michelin),  la terraza-restaurante (¡donde almorcé en varias ocasiones con Oscar de la Renta!) y que ahora, con un techo movible de cristal,  permite comer ‘al fresco’ todo el año –igual que el famoso Bar Hemingway (¡toda una experiencia, con su famoso ‘barman’ Colin Peter Field y donde se creó el Bloody Mary en honor de Hemingway y su esposa Mary )- además del nuevo The Ritz Bar, un bistró casual donde degustar vinos por copas y del Salon Proust, donde tomar el té –o la ampliada zona de la escuela de alta cocina École Ritz Escoffier, donde es posible tomar clases tan solo por 1 dia –o todo un curso diplomado si así lo deseamos.  Por supuesto, su famosa Galerie seguirá teniendo a la venta las joyas y los objetos más lujosos de Paris, además de productos del hotel y de L’Ecole Escoffier, donde siempre he comprado los delantales de la famosa escuela para regalos muy especiales.

Una de las adiciones que tienen a todos hablando es la apertura del primer Club ‘Spa’ de Chanel en el mundo, (¡con una entrada privadísima por un túnel, desde el parqueo adyacente, para las celebridades que lo frecuenten!) el que tiene la famosa piscina neoclásica del Ritz, saunas, baños turcos, las facilidades más modernas ¡y los tratamientos exclusivos de Chanel para la piel! ¿Y la enorme Suite Cocó Chanel? Pues mantiene su elegancia con 2 grandes dormitorios, vestidor, salones con los famosos ‘paravents’ de laca Coromandel de la diseñadora, y el colorido blanco y negro que era su favorito –además de balcón a la Place Vendôme. ¡Una divinidad!
Hemingway en el Ritz
 

Coco Chanel en el balcón de su famosa suite

 

 

Sunday, January 10, 2016

Anderson Cooper to tell his mother's life on HBO

This will be a fascinating documentary! When I started as a journalist in the 70´s I interviewed Gloria Vanderbilt, who was designing jeans --and remember she was so nice and friendly. She invited me to lunch at her showroom on Seventh Ave, where she had a personal chef & 2 waiters serving us! I was barely around 20 and she treated me like a mom! -Another socialite I interviewed at the same time was Charlotte Ford, who was also designing clothes. She also tried to be nice --but was so 'sin gracia' & dry - and her plastic surgery made her mouth go sideways when she spoke. This was sad to see, since I remember her being so beautiful & glamorous in the late 60´s. Yes, she also had a private chef & dining room in her showroom! (I must look for those pictures taken in black and white by my brother)

http://www.dailymail.co.uk/news/article-3389797/Anderson-Cooper-helps-tell-story-mother-HBO-film.html