¿Zapatos? ¿U
obras de arte?
Los zapatos -de
los que siempre he vivido enamorada- cada dia me sorprenden más, porque la última tendencia
son los diseños complicados, con enorme originalidad --y algunos como si fueran
esculturas -- ¡puras obras de arte y también verdaderos 'ejercicios' de
valentía y voluntad para poder caminar con ellos con equilibrio!
Y algunos de última
moda me tienen un poco preocupada, porque no estoy segura si me gusta tan solo
miralos -o ponérmelos. ¡Los veo tan incómodos y raros! Y otros -como los 'sneakers´ (aunque sean de diseño) los detesto.
Por eso es que la
ropa que llevamos debe ser más sencilla, menos complicada, pues los zapatos muchas
veces son la 'estrella' del conjunto que llevamos. Y lo más divertido es que
desde las marcas más caras como Christian Louboutin, con sus suelas rojas, y
los propios "manolos" de Manolo Blahnik --¡hasta los más económicos! -- son definitivamente muy artísticos. ¿Y los tacones?
Como dicen en España ¡de vértigo!
Y esto ocurre en
todas las facetas de la Moda...La ropa, los bolsos, los diseños de muebles, de
objetos para la cocina, para la casa, ...¡y hasta las cosas más tontas!...todas
tienen un giro original, un toque de 'arte' popular, de belleza, de impacto y
hasta de surrealismo.
Y eso me encanta porque es emocionante que en el siglo
XXI haya un mayor respeto al diseño --y este pueda ser llevado a lo cotidiano
con naturalidad y que nadie se sorprenda, ni haya un 'salon des refusés'.
¿Lo peor de todo?
Que muchos de estos zapatos son tan espantosamente incómodos que voy a tener
que hacer como hacía la millonaria árabe Mouna Al-Ayoub, quien tenía sus trajes
de Chanel colocados en maniquíes y los colocaba como adornos en los salones de
su mansión parisina.
Y yo quizás pueda colocar esos zapatos 'de vértigo' junto
a mis libros y mi colección de botellas de perfumes antiguas, en una esquinita
del mínimo librero de mi minúsculo apartamento neoyorquino, donde compartián
'atagère' con muchas otras partes y seres de mi vida.