Wednesday, April 1, 2009

¡Y aquí no ha pasado nada!


Ayer estaba viendo las noticias de la CNN - la que me gusta tener puesta de fondo mientras escribo- y de pronto la 'anchorwoman' anunció un reportaje sobre Cuba, la nueva Bienal de La Habana, etc., etc. --y al final de lo que fue un segmento bastante flojo y tal como se les 'permite' hacer en Cuba a la CNN, la chica comenzó a hablar con el reportero (cuyo padre al parecer es cubano) que estaba loca por ir a Cuba "a disfrutar esos Mojitos" --y otras idioteces por el estilo de los 'fellow travellers'. Y de pronto me dió un ataque de indignación que me sorprendió.

Y me sorprendió porque a veces me siento tan cansada de todo lo de Cuba que me hago a mi misma la promesa de que no voy a seguir luchando por la verdad...Pero en este caso -una vez más- me dolió mucho la realidad.

La 'anchorwoman' que no es cubana ni nada por el estilo, no tiene idea de lo que 50 años de dictadura han dejado atrás --y continúa dejando. Y el hijo del cubano exilado, tampoco sufrió en carne propia las lecciones de lo que es sufrir un exilio y dejar atrás tu país en contra de tu voluntad. Y -sumando uno y uno- llegamos a un 'dos' de pura ignorancia, que desafortunadamente están creando las nuevas noticias sobre Cuba. Y sobre el futuro de Cuba.

Segundos más tarde, el senador Robert Menéndez dijo muy claramente que en Cuba había "una brutal dictadura y punto final" --pero pienso que esas palabras ya no interesan a nadie. Y caen en el vacío. Suenan como una cantaleta nuestra ---y es triste que asi se interprete

Y ahora, con todo este 'buzz' tan 500% frívolo sobre la Bienal de La Habana --y la visita de los galeristas neoyorquinos de Chelsea a La Habana -capitaneados por un cubano exilado dueño de una galería y financiada por la Fundación Amistad en pro del arte y para la amistad entre los pueblos -- pues cada día parece más claro que muchos quieren hacer creer que con el paso del tiempo y la acumulaciñon de sufrimientos y de muertos y de presos --¡es mejor pensar que todo ha quedado atrás, que en Cuba no ha pasado, ni pasa nada, y es mejor ser todos amigos y darnos besos y abrazos!

Yo quiero abrazos, si, y quiero que se abran espacios y quiero que en mi país la gente sea mucho más feliz y viva mejor --pero también quiero que algunos pidan perdón y que se reconozcan las injusticias y las ignominias. ¡Y que paren ya para siempre esas injusticias y esas ignominias! ¿Por qué es tan difícil pedir eso? ¿Qué tiene de malo pedir justicia y transparencia?

Pero cuando las cosas siguen iguales y a las Damas de Blanco se les siga arrestando y los periodistas encarcelados sigan bajo rejas --¿cómo es posible perdonar a quien no está arrepentido de nada?

Y al ser todo como es, todo el arte del mundo no tiene suficiente fuerza, ni pureza, ni sentido de la libertad, para hacernos mirar hacia otro lado.